miércoles, 7 de abril de 2010

Némesis


Una vez más, cambios sin fin y principios sin comienzos. Darse la cabeza mil y una vez contra las mismas paredes que nos aterran y nos llaman al mismo tiempo puede considerarse como algo masoquista, o como algo que enseña.
La vida te enseña a los palazos, no hay con qué darle. Principios de cosas nuevas, mejores quizá, principio de volver a sentir, de volver a ser... De volver a reír sin razón o de llorar de alegría, de sentirnos únicos para alguien en éste mundo ("Alguien en el mundo piensa en mí") alguien sos vos, alguien soy yo, alguien somos todos... Empezar a extrañar de nuevo, ¿Quién te dice que no a sufrir? Sufrir le da un gusto especial a las cosas, amargo, pero especial... A veces cuando me pongo a reflexionar pienso en que aburrido y rutinario sería todo si no existieran los malentendidos, las peleas, las discusiones, las dudas, los enojos, etc. La vida esta compuesta por momentos y cosas hermosas, y otras cosas que aunque haya momentos en los que nos hacen mierda, son las que más nos enseñan, nos ayudan a crecer... Por más que hoy sientas que estás odiando a alguien por algo que te hizo, o que le hizo a alguien que querés, o por algo que dijo; el día de mañana, puedo asegurar, que vas a agradecer que esa persona se haya cruzado en tu camino, que te haya "cagado" o "defraudado" de una u otra manera, pensemos lo positivo, la mitad del vaso lleno; si el mundo no estuviese plagado de este tipo de personas, nunca aprenderíamos nada, o quizá sí. Yo puedo agradecer a esas personas que me hicieron sufrir, me ayudaron a darme cuenta de que en la vida no todo es color de rosas y que a veces es necesaria alguna que otra lágrima para entender varias cosas.
Cada cual tiene un némesis, una justa fuerza compensadora de otra. A veces se puede confundir con contradicción, pero no.
No nos dejemos confundir por quienes quieren nublar nuestros caminos, quienes quieren alargarnos o hacernos más complicados nuestros respectivos caminos hacia la felicidad, por así decirlo... No les demos el gusto a esas personas de vernos quebradas, que sientan que lograron el cometido de sacarnos las sonrisas de las caras, de provocarnos sólo lágrimas y dolor.
Carolina Narvaja

"Alguien me ha dicho, que la soledad se esconde tras tus ojos. Y que tu blusa atora sentimientos que respiras. Tenés que comprender que no puse tus miedos, donde están guardados, y que no podré quitártelos si al hacerlo me desgarras. No quiero soñar mil veces las mismas cosas, ni contemplarlas sabiamente, quiero que me trates suavemente.
Te comportas de acuerdo, con lo que te dicta cada momento, y esta inconstancia no es algo heroico, es mas bien algo enfermo."

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